Mary and Max basada en un hecho real y animada en stop-motion, narra la historia de Mary, una niña de ocho años quién mantiene una amistad por correspondencia con Max un ateo de 44 años; el primer largometraje del australiano Adam Elliot.
Mary and Max es un filme australiano de animación stop-motion escrita y dirigida por Adam Elliot en 2009, es un fantástico drama que se convirtió en película de culto casi antes de su estreno. La imaginación, amor y paciencia que Elliot dedica, se ve reflejado en cada uno de los personajes e interiores, los paisajes de Australia y Nueva York son maquetas de escenarios reales y la cinta cuenta con alrededor de 132,480 meticulosos fotogramas montados secuencialmente.
Mary and Max, el primer largometraje del australiano Adam Elliot y tardó cinco años en completarse, su costo total fue de casi 8,3 millones de dólares australianos y se utilizaron 133 sets, 212 marionetas y 808 cajas miniaturas Earl Grey (bolsitas de té); Mary and Max se desarrolla en un mundo de colores opacos, líneas desiguales, personajes con ojos grandes; la animación de Elliot está orientada a adultos, con temas como el rechazo social, suicidio, depresión, alcoholismo, agorafobia, patologías psicóticas, orientación sexual y creencias religiosas.
A lo largo del filme se desarrolla una fuerte amistad entre Mary, quién es una niña de 8 ocho años que vive en Australia, y Max, un hombre de 44 años que vive en Nueva York, quiénes mantienen una relación por correo postal, los siguientes veinte años mantienen un relación de amistad. Ambos esperan con emoción la respuesta del otro lado del mar. Sus vidas solitarias se hacen más llevaderas, crece la autoestima en ambos y la ilusión de conocerse algún día los mantiene a flote.
Por: Gabriela Vera.