Inspirado en las piezas fósiles atrapadas en cápsulas de ámbar, el fotógrafo Blake Little logró crear a principios de este año, una serie de imágenes cautivadoras en las que congela por un instante el cuerpo humano.
Palabras como profundidad, preservación, sensualidad y el enigma detrás del modelo, vienen a la mente cuando analizamos el trabajo de Blake Little, que a estas alturas se perfila como uno de los más sobresalientes del 2015. El proyecto titulado ‘Preservation’, logró darle la vuelta al mundo gracias a las plataformas digitales; en unos cuantos días, cientos de personas disfrutaron las imágenes de decenas de modelos (de múltiples aspectos y edades) cubiertos bajo litros y litros de miel. Todo esto con el único objetivo de conseguir un efecto verdaderamente cautivador en cada toma.
La serie estuvo expuesta hasta el 18 de abril en la galería Kopeikin de Culver City, California, para luego convertirse en un libro de edición limitada. Una propuesta que llamó mucho la atención a principios de año y que a más de medio año de distancia aún cautiva los sentidos y nos atrapa la mirada.
A continuación el trabajo:
Sin embargo, más allá del resultado, una de las mejores formas de apreciar esta clase de trabajos es sumergiéndonos por completo en el proceso creativo del autor:
