Gina Arizpe es una artista originaria de la Ciudad de México, la mayor parte de su obra, realizada en espacios abiertos, la ha llevado a intervenir las calles del DF, Puebla, Ciudad Juárez y Los Ángeles, además de contar con exposiciones colectivas e individuales en varios museos del país, así como Estados Unidos y Europa.
La calle se ha convertido en su estudio de trabajo, lugar donde disfruta crear con base en lo que ve, y se ve influenciada directa o indirectamente de ella. Su obra se produce gracias a la conciencia social que la artista porta y que manifiesta por medio del performance e instalaciones que desarrolla.
Estudió la Maestría en Artes por la Facultad de Artes Visuales de la UANL, a su vez fue miembro del colectivo regiomontano marcelaygina por más de 13 años, a partir de este periodo es cuando empieza a definir su tendencia creadora hacia temas como identidad, frontera, migración y exclusión.
Gina será tallerista en PIPA, Programa de Iniciación en la Práctica Artística de Centro ADM, dirigido a artistas visuales emergentes, gestores culturales y estudiantes egresados de áreas afines a las artes visuales, para la producción de sus proyectos. Para que conozcan más acerca de Gina, les presentamos tres de sus obras más destacadas.
En la calle / cuerpo cubierto, 2013
Es una serie de fotografías que muestran a un cuerpo postrado, cubierto por una sábana, que invade las calles de Los Ángeles, la intención de Gina es mostrar la transformación de un objeto que remplaza al sujeto, dentro de un espacio asociado únicamente a éste último.
Sobre la alfombra, 2012
Una obra que se presentó en el museo La Pajarera, en Puebla. La pieza tenía como finalidad generar la reflexión sobre los niños de escasos recursos que no tienen acceso a la educación, ya que Puebla es el estado con unos de los índices más altos de deserción escolar en México. Se le pidió a los niños cambiar su ropa desgastada por nueva, y con este material recolectado y en colaboración con un grupo de estudiantes y maestros del Universitario Bauhaus y de un grupo de padres de familia de la escuela primaria Enrique Rebsamen, se configuraron grupos de tejido, en donde, la actividad manual derivo en la creación de dicha alfombra.
Sin rastro, 2012
Esta pieza fue desarrollada para la exposición colectiva Maletas Migrantes en el Museo de la Memoria y Tolerancia, donde le fue entregada a la artista una maleta y 500 pesos para intervenirla, con los que compró víveres y objetos necesarios que pudieran servir a un migrante en su viaje, que posteriormente le fue entregada a Carlos Guzmán Pineda, un migrante hondureño que se dirigía a Houston, Texas en Estados Unidos.
