Cada tres años, más de 70 hectáreas en Japón se cubren con instalaciones monumentales, colores y obras de arte interactivas.
Para muchos puede sonar exagerado hablar del “festival de arte más grande del planeta”, sin embargo para entender la proporción del Echigo-Tsumari Art Triennial 2015 hay que analizar sus números: durante 50 días, un colectivo aproximado de 160 artistas (de todos los rincones del planeta) se reúnen en la localidad de Niigata. Allí, montan una exhibición que recorre más de 200 aldeas con una extensión superior a 70 hectáreas.
¿Impresionante no?
Sin embargo este festival no sólo es relevante por su magnitud, sino por la calidad mostrada en cada una de las piezas que se exhiben. Desde su creación en el año 2000, el Triennale tiene un nivel de producción elevado y un encanto único en cada una de las obras mostradas. Para esta sexta edición no fue diferente, y algunos de los resultados estarán disponibles en un libro que saldrá a la venta este fin de semana.
Aquí un pequeño adelanto del mismo: